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viernes, 17 de agosto de 2012

Tirar basura en la vía pública, daña bombas de cárcamos
v  Retiran 100 toneladas de basura de rejillas cada dos meses
v  Daniel Salinas Falcón informa que en unos días más concluirán con el mantenimiento a cárcamos, en tanto, limpian canales a cielo abierto y reparan hundimientos.

Para evitar encharcamientos y posibles anegaciones en calles y colonias, es necesario que la ciudadanía y sociedad en general coopere activamente evitando tirar basura en la vía pública, ya que tan sólo en dos meses promedio se recogen cien toneladas de desechos, lo cual afecta a los equipos de bombeo en cárcamos, reveló el director del Sistema de Agua y Saneamiento (SAS) del Ayuntamiento de Centro, Daniel Salinas Falcón.

Ante la proximidad de las lluvias, el funcionario municipal dio a conocer que continúan con el mantenimiento a los cárcamos de esta capital, la limpieza de canales a cielo abierto y reparando algunos hundimientos en coordinación con los delegados de las colonias, pero sobre todo, recogiendo basura.

Salinas Falcón insistió, en que tirar los desechos en la vía pública, físicamente tapa las alcantarillas, pues hay veces que se observan en las esquinas encharcamientos de agua, y lo único que hay que ir, es a quitar un costal vacío o algo que tapó la rejilla, sumándole los miles  de ‘vasitos’, popotes, bolsas etcétera.

Abundó en que la basura que logra pasar, llega a los cárcamos atascando las bombas y averiándolas  al grado de frenarlas y quemarlas de tanto desperdicios.

El director del SAS detalló que si un cárcamo posee tres bombas y se echa a perder una por la basura, pues obliga a bajarle el 33% de la eficiencia, y en un momento de lluvia, es grave; por eso es que se deben tener los cárcamos al cien por ciento.

Salinas Falcón comunicó también, que faltan unos 15 días para concluir  todo el mantenimiento de los cárcamos, por de pronto se está a un 80% de la rehabilitación y en unos días estaremos al cien por ciento.
Gobierno que privilegia al ser humano por encima de las cosas materiales


Una vez más la naturaleza nos ha puesto a prueba a los tabasqueños y al gobierno que jefatura el químico Andrés Rafael Granier Melo. El huracán «Ernesto» causó daños a viviendas, infraestructura productiva, equipos y artes de pesca, y caminos en tres municipios de Tabasco; Paraíso, Cárdenas y Huimanguillo, y provocó encharcamientos y anegaciones en otras partes del estado. Las inclemencias del tiempo dejaron también, además de daños materiales, dos pérdidas humanas que lamentar.

Quizá los daños hubieran sido mayores, solo que los esfuerzos del gobierno del estado y la disposición del pueblo tabasqueño a cooperar, han rendido sus frutos en la práctica y arraigo de la cultura de la prevención.
Esto último, en lo que han intervenido de manera importante las tres instancias de gobierno a través de diversas dependencias, así como el ejército mexicano y la marina armada de México mediante sus planes DN-III y Marina, respectivamente, ha dado excelentes resultados, ya que una adecuada planeación, una buena organización y colaboración, han permitido atender de manera puntual e inmediata todos los requerimientos que conlleva proteger y auxiliar a la población en riesgo, frente a determinada contingencia natural o provocada.

Por eso cobra especial significado la forma de actuar del gobernador Granier Melo, quien ha impulsado siempre, desde que gobernó el municipio de Centro, la cultura de la prevención como forma permanente de evitar, o atenuar, riesgos a la población civil que, en los últimos años, y en especial del 2007 a la fecha, ha enfrentado fuertes problemas generados por el impacto de fenómenos hidrometeorológicos: desde la destrucción de infraestructura vial y productiva en todos los aspectos, hasta enormes pérdidas económicas y la agudización de la pobreza.

En todos y cada uno de tales episodios y circunstancias, ha estado siempre dispuesta la presencia del mandatario estatal para atender las necesidades primordiales de la población afectada. Lo mismo se le ve al químico Granier en reuniones de planeación y evaluación de los avances de acciones emprendidas, que en los lugares afectados para conocer de manera directa la situación y la magnitud de los desastres, lo que le permite ordenar y dirigir la más adecuada de las respuestas ante las emergencias, privilegiando siempre el rescate y seguridad de las personas, y la protección de sus bienes, por encima de las cosas materiales.

Esto habla de la calidad humana de quien gobierna Tabasco y está a poco más de cuatro meses de cumplir su mandato, del carácter y firmeza con que encara todas y cada una de las adversidades que se le presentan en la difícil tarea de gobernar, de la determinación de cumplir con su responsabilidad hasta el último día de gestión, sin tomar en cuenta voces discordantes, sin prestar atención a sus detractores y malquerientes, sin responder a sus enemigos políticos, dedicado solo a servir, a gobernar para todos sin distingo alguno.

Andrés Granier, en el último tramo de su gobierno, tiene muy claros sus objetivos y muy presentes sus responsabilidades. Si lo ha hecho bien o mal, en su momento el pueblo y la historia lo juzgarán. Los cientos de miles de tabasqueños que durante casi seis años de circunstancias difíciles han recibido el apoyo de su gobierno, son los que saben bien a bien lo que por ellos ha hecho quien ha privilegiado al ser humano por encima de las cosas materiales.
Por parte del gobierno de Andrés Granier
Reconocimiento al valor, entrega y sacrificio de policías caídos en cumplimiento de su deber
v  Todos ellos han ofrendado su vida para que los tabasqueños en general podamos desenvolvernos, cada quien en la actividad lícita que nos corresponda.
v  Constituyen una muestra de lo brutal y doloroso de la lucha contra la delincuencia en Tabasco, y del alto costo que tiene para el gobierno, la sociedad, y sobre todo las familias que los han perdido.
v  Entre la indignación y el dolor se yergue el orgullo familiar por su ejemplar valor y entrega, por su sacrificio, que no ha sido en vano.
Durante el gobierno que jefatura el químico Andrés Rafael Granier Melo, que transita su último tramo, se han invertido importantes cantidades económicas en cuando menos tres rubros que son pilares fundamentales de atención colectiva para mejorar el nivel de vida, el desarrollo integral, y la seguridad de los ciudadanos tabasqueños.
   A educación, salud y seguridad pública y procuración de justicia, se ha destinado gran parte del presupuesto público, desde el inicio de la actual administración. No se ha escatimado en recursos hasta donde las condiciones en las que ha transitado el gobierno granierista lo han permitido, gobierno sujeto a circunstancias difíciles, a inéditas pruebas generadas por la naturaleza, la crisis económica mundial, y la presencia y acción de grupos criminales que amenazan la integridad física y el patrimonio de los ciudadanos, que siembran el terror y la incertidumbre en la sociedad, y que vulneran y ponen en riesgo a las instituciones.
   En este último tema, que lastima a la sociedad mexicana en general y tabasqueña en particular, la inversión y los esfuerzos del gobierno del estado no tienen precedente. Infraestructura, capacitación de personal administrativo y operativo, equipamiento, adquisición y uso de tecnología de punta, y una constante actualización en materia jurídica y legal, forman parte del esfuerzo gubernamental e institucional para enfrentar a la delincuencia común y organizada en Tabasco.
   El combate al crimen organizado lo ha realizado el gobierno de Andrés Granier con toda seriedad, sin descanso, al límite de los recursos institucionales, legales, económicos y materiales, lo que no se puede negar.
   La lucha contra la delincuencia en este gobierno, ha tenido resultados, alcances medibles, pero también consecuencias lamentables, como la pérdida de la vida de un significativo número de efectivos policiacos que han caído en el cumplimiento de su deber, y en la tarea de proteger la vida de los ciudadanos y la integridad de las instituciones.
   Precisamente hace pocos días, el gobierno que jefatura el químico Andrés Rafael Granier Melo, ha iniciado una serie de actos de institucional reconocimiento y homenaje póstumo a integrantes de los diferentes cuerpos de seguridad pública y procuración de justicia que han muerto en el cumplimiento del deber, en el combate frontal a las bandas criminales y transgresoras de la ley.
   Uno de estos actos se realizó en las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado, en presencia de autoridades civiles y militares, así como de familiares de los policías caídos cuyos nombres quedaron inscritos en un sencillo pero significativo monumento en homenaje y recuerdo de ejemplares guardianes de la ley, el orden y la seguridad en Tabasco.
   En total, 16 policías pertenecientes a la PGJE han sido abatidos por las bandas criminales, agraviando a la sociedad en general, enlutando hogares.
   Los agentes Santos Victelio Guitar Torres, Nazario de la Cruz Merodio, Miguel Ángel Sánchez Gil, Rogelio Pérez Vidal, José del Carmen Zapata Martínez.
   Los comandantes Kalenin Garrido Cárdenas, Carlos Manuel Villegas Márquez, Marcelino de los Santos Ramos, Miguel Enrique López López, Ángel Sánchez Torres, Carlos Federico López Brito, Miguel Ángel Gamas Garduza, Almilcar Martínez Cruz, Martin Rafael Cornelio León y Daniel García Melo, y el subdirector Heberto Pérez Ramírez.
   Todos ellos ofrendaron su vida para que los tabasqueños en general podamos desenvolvernos, cada quien en la actividad lícita que nos corresponda. Constituyen una muestra de lo brutal y doloroso de la lucha contra la delincuencia en Tabasco, y del alto costo que tiene para el gobierno, la sociedad, y sobre todo las familias que los han perdido, sin embargo, al mismo tiempo, entre la indignación y el dolor se yergue el orgullo por su ejemplar valor y entrega, por su sacrificio, que no ha sido en vano.
   El gobernador Andrés Granier reconoce que gracias al esfuerzo, entrega y lealtad de los cuerpos policiacos del estado, y el apoyo permanente de las fuerzas federales, Tabasco ha podido bajar los índices en delitos de alto impacto, como homicidio, extorsión y secuestro. Los índices en homicidios se redujeron en 12 por ciento; en extorsión, 21 por ciento; y en secuestro, 31 por ciento, con lo que Tabasco refrenda su compromiso de garantizar seguridad a su población.
   El mandatario estatal,  reitera su compromiso de seguir combatiendo al crimen organizado: “Continuaremos esta batalla, porque también es un compromiso con quienes han caído en esta lucha, pues es una forma de dejar claro que su sacrificio no fue en vano y que su memoria está presente en todo momento”
   Al entregar reconocimientos a familiares de los 16 policías ministeriales caídos, el mandatario tabasqueño dijo que el pueblo de Tabasco deja un testimonio de gratitud con quienes con valentía, vocación de servicio y en cumplimiento de su deber, ofrendaron su vida en el combate a la delincuencia.
   Se trata —subrayó— de una lucha en la que no se ha bajado la guardia ni un solo instante, con estrategias, coordinación y la participación efectiva de las fuerzas armadas para lograr la captura de importantes líderes, la detención de secuestradores, la desintegración de bandas delictivas de alcance regional dedicadas a la extorsión y ejecuciones, así como al tráfico ilegal de combustible y de droga, con redes de operación, incluso, en Guatemala y Colombia.
   Al reconocimiento hecho por el gobernador Andrés Granier, se suma también el del procurador de justicia Gregorio Romero Tequextle, quien señaló que la policía es fundamental para gobernar a los pueblos, porque es la que cumple los mandatos de la autoridad, y en el caso de la Policía Ministerial, es la que investiga por orden del Ministerio Público, la que lo auxilia para la integración de una averiguación previa, la que da orden y seguridad a la función de procurar justicia y es la que da cumplimiento a las órdenes de aprehensión.
   Gregorio Romero ha pedido reconocer su aportación social a la Policía Ministerial para el mantenimiento del orden y la seguridad. “Reconozcamos a aquellos policías que diariamente ponen en peligro su vida, con el objetivo fundamental de servir a la sociedad”
    El procurador de Justicia dijo que los policías, cuyos nombres quedaron grabados en la placa alusiva, son y serán ejemplo para las nuevas generaciones de servidores, que anteponen el deber a cualquier interés particular.
    Han sido testigo de este homenaje póstumo, Rodolfo Campos Montejo, presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Sergio López Uribe, secretario de Seguridad Pública (SSP), entre otras autoridades civiles y militares.
    El gobierno hace lo que le corresponde y rinde homenaje a los policías caídos en el cumplimiento de su deber, que no son solo ministeriales, también son preventivos, también federales, también miembros del glorioso Ejército Mexicano y la Marina Armada de México.
    ¿Cuándo la denominada sociedad civil hará lo propio para reconocer de manera pública el sacrificio de aquellos policías caídos en el cumplimiento de su deber, e incentivar y premiar el esfuerzo y dedicación de aquellos que continúan en la lucha contra la delincuencia?