DIPUTADO RICARDO DE LA PEÑA MARSHALL:

HAY QUE PONER ORDEN EN LA FRONTERA SUR, NO CERRARLA

 Acepta la militarización de la frontera sur de México, pero para que quienes quieran entrar al territorio nacional lo hagan en orden, con un registro de quienes son, a donde van y que van a hacer en suelo mexicano.

 Afirma que la inmigración española de hace 80 años se comprometió con el país y ayudó a construir una nueva sociedad mexicana, la inmigración centroamericana solo nos ve como zona franca, de paso para llegar a Estados Unidos.

 Se pronuncia por  ayudar a crear verdaderas condiciones de calidad de vida en Centroamérica, por
 retomar la presencia de México  y el control ideológico de Centroamérica, para poder empezar a consolidar y estabilizar a los países de esa región: “formamos parte de un mismo proceso de conquista, parte de una misma cultura: la maya, y parte de un mismo territorio: Mesoamérica. Entonces, es un espacio natural con fondos comunes”


VILLAHERMOSA, TABASCO, MÉXICO. Junio 17 de 2019.- El diputado federal tabasqueño Ricardo de la Peña Marshall coincide con el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en que los mexicanos y sobre todo los tabasqueños tenemos que ver como hermanos a los centroamericanos, pero—puntualizó—existe la necesidad de mantener un control en la frontera, la cual tiene que ser militarizada para que haya realmente un orden, y que todo aquel que quiera entrar a México lo haga, pero con un registro en el que se indique quien es, a donde se dirige, y que va a hacer. “Se trata de poner orden en la frontera sur de México, no cerrarla”, precisó.

Integrante de la LXIV Legislatura en el Congreso de la Unión, e invitado al evento de la Transición de la Presidencia, Secretaría Ejecutiva y Dirección Técnica del Observatorio de Participación Política  de las Mujeres en Tabasco, realizado en la sede del Poder Ejecutivo Estatal (Palacio de Gobierno) en Villahermosa, al término, Ricardo de la Peña Marshall sostuvo una amena plática con integrantes del Grupo Plural de Comunicación, entre estos el Semanario El Gallo Choco, ante quienes se mostró partidario de poner orden en la frontera sur del país y por ello justificó la recién reforzada presencia de elementos de la Guardia Nacional, la Marina, el Ejército Mexicano, la Policía Federal y personal del Instituto Nacional de Migración, entre otros.
“Yo sí soy partidario de que hay que ponerle un orden a la frontera, y para eso tenemos un sistema de inteligencia, tenemos un sistema de seguridad que decidirá que cordón poner para que, quien quiera entrar, lo haga en orden, y se eviten los desaguisados como el de los cubanos y centroamericanos que se amotinaron y escaparon de los centros migratorios alegando sus derechos humanos, que desde luego  tenemos que aplicarlos porque es un compromiso de la sociedad mexicana, somos una sociedad comprometida con los derechos humanos” indicó el también integrante de la Comisión de Derechos Humanos en la Cámara de Diputados.
El también Licenciado en Historia por la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG), luego de hacer un pormenorizado relato de los fenómenos migratorios que se han presentado en nuestro país, y de establecer una notable diferencia (sin subyugar, hacer menos, o denigrar, sino precisar que son dos migraciones con características totalmente diferentes, dos procesos diferentes) entre la inmigración española de hace 80 años y sus aportes (una migración de calidad que se comprometió con el país  y ayudó a construir una nueva sociedad mexicana), y los objetivos de la actual inmigración centroamericana (que simplemente nos ven como zona franca de paso para llegar a los Estados Unidos), de ésta última señaló que es motivada por los constantes fenómenos de violencia en esas naciones: desde la guerrilla y la contraguerrilla; la acción de sus dictadores en su momento; y en los años 80s y 90s el surgimiento, muy sólido, de Maras y de mafias, lo que fue abonando al descontento de la gente, a la pobreza, y a la inconformidad de quienes no se les permite salir a tener más educación, a desarrollarse, a crecer.

“Esa problemática es la que nos está rebotando en estos momentos”, aseveró el diputado federal, quien no omitió opinar en que muchos de los problemas de Centroamérica los generó Estados Unidos, pero indicó también que México abonó a profundizar esa problemática al retirarse del área y dejar el control de la región a los Estados Unidos.

Por lo anterior, Ricardo de la Peña Marshall, explicó: “Creo que desarrollando la economía y dándole nuevas oportunidades a la gente de Centroamérica—que es la idea del presidente Andrés Manuel López Obrador--caminando en ese sentido, podemos empezar a disminuir la violencia, porque la gente está migrando por miedo, por violencia directa a ellos, y entonces, cuando desaparezcan las razones de esos miedos y de esa urgencia de venir al norte, la alta migración centroamericana irá disminuyendo”
“La solución puede ser por ahí, empezar a crear verdaderas condiciones de calidad de vida en Centroamérica, y eso se puede hacer con la penetración de las compañías mexicanas, los mismos tabasqueños podemos tener enormes oportunidades de negocios en Centroamérica como se intentó hacer en los años 80s cuando se estableció un vuelo de Villahermosa a Guatemala, y sin embargo, el vuelo se dejó por no costeable, porque los tabasqueños no queríamos ir. Luego se dio lo de El Ceibo, los dos primeros años hubo una enorme migración comercial de centroamericanos hacia Tabasco, a Villahermosa,  porque para ellos se les descubrió el mundo, hubo la oportunidad de productos que ellos no tienen o que eran más baratos por la paridad del cambio.
El diputado federal de Mayoría Relativa (Distrito 6, Villahermosa), habló  de lo que propuso durante su participación en el Programa de Parlamento Abierto, que se transmitió en el Congreso de la Unión el pasado miércoles 12 de junio de 2019: “Lo que propuse en ese programa , y propongo, es que, primero: tenemos que retomar la presencia de México  en Centroamérica, tenemos que retomar el control ideológico de Centroamérica ¿Por qué razón? Porque hoy los desconocemos, y formamos parte de un mismo proceso de conquista, formamos parte de una misma cultura: la maya, y formamos parte de un mismo territorio: Mesoamérica. Entonces, es un espacio natural con fondos comunes. Comemos casi lo mismo, hablamos casi igual: unos cantadito, otros pujadito, pero usamos casi las mismas palabras, y el tabasqueño en su forma de ser y hablar se parece más a un Centroamericano que a un chiapaneco, campechano, yucateco o quintanarroense, y eso nos marca”—subrayó quien fuera en su momento también Director del Archivo Histórico del Poder Ejecutivo del Estado de Tabasco.
Y concluyó: “Es lo que tenemos que hacer,  son poco más de 90 kilómetros de frontera con Guatemala, ¿Y cuántos de nosotros conocemos Guatemala? Entonces, primero tenemos que vernos en el espejo, reconocernos como parte de Centroamérica, en lo local. En lo nacional, como federación, tenemos que retomar nuestra presencia en Centroamérica, para poder empezar a consolidar y estabilizar esos países”