¡Nadamás eso faltaba! Quien durante más de cuatro años, literalmente se zurró en los periodistas y comunicadores, en la Prensa de Tabasco, y con ello también en la sociedad tabasqueña en general, hoy con el cinismo más brutal, y con una actitud oportunista, exige desempolvar de los cajones del olvido legislativo, Iniciativas que otros diputados, de anteriores y la actual legislatura, han presentado para legislar en materia de protección a periodistas y defensores de Derechos Humanos y de la Libertad de Expresión.
Esta persona que hoy es diputada (Plurinominal) en la LXIII Legislatura, gracias al regalo hecho por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) obedeciendo instrucciones de Arturo Núñez Jiménez, relegó y desdeñó, y con ello, no solo "mató" una respetuosa y sana relación Prensa-Gobierno de Tabasco sino que condeno a la sociedad en general al imperio de la desinformación trastocando el derecho ciudadano a ser informado de las acciones de gobierno con oportunidad y veracidad, con el objetivo de formarse opinión con pleno conocimiento para evaluar el desempeño de su gobierno, no con percepciones, especulación, o suposiciones.
Durante su paso por la Coordinación General de Comunicación Social y Relaciones Públicas, del gobierno encabezado por Arturo Núñez Jiménez, es notorio que quien hoy se "desgarra las vestiduras" en defensa de la Prensa en Tabasco, ha sido quien más ha, en los hechos, dañado a periodistas, comunicadores, no obstante que alguna vez ejerció el oficio.
Se sabe que manejó un millonario presupuesto para financiar gastos en materia de comunicación social e imágen institucional del gobierno de Tabasco, recursos que desde luego no está claro en dónde ni en beneficio de qué y quienes fue invertido, pues la imágen institucional del gobierno de Tabasco terminó destrozada, y la Prensa tabasqueña menospreciada, brutalmente discriminada, para dar paso, según versiones del dominio público, a favoritos, incondicionales y "empresas" de comunicación "fantasmas", locales, regionales y nacionales, con los que habría signado "jugosos" contratos de publicidad, con resultados económicos más que excelentes, pero escandalosamente nulos en positivo impacto en materia de comunicación e información pública del gobierno ante la sociedad en general.
¿Cómo es que se atreve a manifestarse públicamente a favor de los intereses profesionales, personales, de bienestar familiar, y de seguridad, de los periodistas, comunicadores, Prensa sobre todo independiente, cuando la misma hoy diputada Dolores (vaya que es un dolor) del Carmen Gutiérrez Zurita, es principal artífice ( la secundó Francisco Peralta Burelo quien la sustituyó en la ahora desaparecida CCSyRP) de la difícil situación que atraviesa la Prensa tabasqueña?
En su momento Dolores Gutiérrez Zurita, hoy convertida en simuladora reivindicadora de la lucha por la seguridad de periodistas y comunicadores, agredió no con balas sí con desprecio y discriminación a la Prensa de Tabasco.
Esta señora no tiene autoridad moral, entre comunicadores y periodistas, para erigirse en defensora de los trabajadores de la Prensa, porque ha sido la más despiadada de sus verdugos (hay otros diputados y diputadas que la secundan en su odio y desprecio por la Prensa).
Los comunicadores, los periodistas, la Prensa tabasqueña, no necesitamos de los simulados respaldos de esta diputada de doble moral política, de quien hundió incluso en el descrédito a quien le dio la oportunidad de ser su "guardaespaldas mediático", el que finalmente salió huyendo de Tabasco; Arturo Núñez Jiménez.
Ya bastante tiene la Prensa tabasqueña (en especial la independiente por la que ella y otros integrantes de la LXIII Legislatura muestran en lo real el mayor de los desprecios y el menor de los respetos) con la lamentable situación que enfrenta con la falta de seguridad y garantías en el ejercicio de la actividad; con las dificultades para hacerse de equipo y actualización que ayuden a realizar mejor su tarea de informar; con lo angustiante de poder llevar el sustento a la familia y el apoyo a los hijos estudiantes; con la ausencia de una política pública que marque con claridad y sin discriminación las reglas para una transparente y duradera relación Prensa- Gobierno- sociedad.
Los trabajadores de la Prensa, esta parte de la sociedad que debiera ser importante, cuidada, respaldada, impulsada para ser cada día más profesional y servir mejor al pueblo, es por ahora atacada, estgmatizada, discriminada, y mentes retorcidas intentan acallarla a como sea.
Gutiérrez Zurita y Francisco Peralta Burelo hicieron lo posible para tratar de destruir a la Prensa en Tabasco, intentaron desaparecerla, ¡y fracasaron en su deleznable misión, aunque al menos ellos hayan tenido éxito en sus propios y ambiciosos proyectos personales. (Difusión: Grupo Plural de Comunicación. GPC/Semanario El Gallo Choco/ Semanario Rumbos Políticos/Contacto Tabasco/12-02-2019)
